El terror crece
Si algo diferencia la avispa japonesa de otras especies de avispa es su gran tamaño. Pueden llegar a mediar más de 5 cm mientras que una avispa común alcanza como mucho 1,5 cm. Su envergadura y el tamaño de su aguijón también son mucho mayores que en otras especies. La avispa japonesa es una especie invasora que llega de Japón y es pariente de la temida avispa asiática que procede de China. Su aspecto es similar al de la avispa europea, con un cuerpo de color negro cruzado con franjas amarillas, la avispa japonesa tiene una mandíbula fuerte y las patas delanteras de un llamativo color naranja.
¿Dónde podemos encontrar avispas japonesas?
Aunque es una avispa que proviene de Japón, es capaz de adaptarse con rapidez a la vida en otros lugares y desde hace tiempo se ha convertido en una plaga en paises como España. La avispa japonesa prefiere vivir en climas templados, necesita el frío para la gestación de sus crías y el calor extremo puede llegar a matarlas. No es una avispa solitaria, a la avispa japonesa le gusta vivir en colonias numerosas y, al ser una especie depredadora de gran voracidad, puede ocasionar graves daños a otras especies como las abejas por lo que su aparición requiere medidas de control. La avispa japonesa es una de las principales causas de la extinción de abejas en el mundo. Si encuentras un nido de avispas japonesas en tu casa o tu jardín, es recomendable que avises a un especialista en control de plagas y no intentes quitarlo tú mismo, pues puede ser muy peligroso. Si quieres intentarlo tú mismo, el mejor momento para hacerlo es a finales de febrero, cuando la colmena está vacía. Aun así, pueden quedar avispas japonesas en el nido.
¿Es peligrosa la avispa japonesa?
La avispa japonesa no es sólo una temible depredadora para las abejas, también puede ser un grave problema para la salud pues su picadura no es igual que la picadura normal de las avispas. No es un animal que ataque al ser humano, pero no dudará en hacerlo si se siente amenazada y la picadura de una avispa japonesa emite unas feromonas que alerta a otros miembros de la colmena para que ataquen. El veneno que injecta la avispa japonesa provoca un dolor letal. Además, es muy peligroso para el cuerpo humanos pues funciona como una especie de ácido que provoda la desintegración de la piel y contiene una neurotoxina que puede llegar a causar la muerte incluso a personas que no sean alérgicas a este tipo de insecto. Si te pica una avispa japonesa puedes limpiar la picadura con agua corriente y, si es posible, sacar el veneno y enfríar la picadura. Es recomendable acudir a un centro médico.