Peligro al aire libre
Las picaduras de avispas o mosquitos no son el único peligro cuando hacemos actividades al aire libre. Existen otros insectos que se esconden en los entornos naturales y que también pueden producir dolorosas picaduras como es el caso de las garrapatas. Es díficil detectar la presencia de garrapatas cuando paseamos por entornos naturales. No vuelan y se esconden en la maleza esperando que alguien pase a su lado para agarrarse con fuerza a su piel y alimentarse de sangre. Las garrapatas no sólo afectan al ser humano, es muy frecuente que las mascotas también sufran picaduras de garrapata y, aunque siempre ha sido un insecto de ambiente rural, últimamente también podemos encontrar picaduras de garrapata en las ciudades.
¿Cómo reconocemos una picadura de garrapata?
La picadura de garrapata no se diferencia en exceso de la de otros insectos: produce una hinchazón que pica y que puede durar varios días. Sin embargo, suele ser fácil descubrir que la picadura es de garrapata porque este insecto se toma las cosas con mucha calma. La garrapata se agarra a la piel y permanece allí muchas horas, alimentándose. Para que no te des cuenta, la garrapata inyecta un anestésico que hace que al principio no notes su presencia, pero no es díficil descubrir al insecto agarrado a la piel.
Tratar una picadura de garrapata
Hemos descubierto una picadura de garrapata y el insecto está agarrado a nuestra piel. ¿Qué hacemos? Lo recomendable es acudir a un centro médico para que sean los profesionales los que quiten el insecto. Si no es posible, la mejor forma de quitar una garrapata es con una pinza sin dientes, tirando de la garrapata en dirección perpendicular a la piel. Hay que hacerlo de forma suave y firme hasta que la picadura de garrapata se vea libre del insecto. No es recomendable aplicar remedios caseros sobre la picadura de garrapata, sólo tienes que lavar la zona afectada con agua y jabón. La picadura de garrapata desaparecerá al cabo de unos días. ¡Lo más importante es no rascarse!
¿Puede ser peligrosa una picadura de garrapata?
La picadura de garrapata no es peligrosa y, en la mayoría de los casos, no causa ningún problema. Sin embargo, se ha dado algún caso en el que la picadura de garrapata ha sido transmisora de enfermedades como la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo o la fiebre botonosa. Esta última provoca escalofríos, fiebre alta, dolor de cabeza y fotofobia. Esto sucede en casos muy raros, pero no está de más estar atentos los días siguientes a la aparición de la picadura de garrapata por si aparecen algunos de estos síntomas.